El “Efecto víctima identificable" o "Qué nombre poner a un Huracán"
Los nombres de los huracanes que cada año llegan a las costas del continente americano son escogidos en orden alfabético, de la A (el primero de la temporada) a la Z. Al final, el nombre que le pongas no tiene relevancia en la potencia del huracán y en el desastre que puede provocar… ¿cierto?
Cierto. A medias.
Un huracán no pasará a ser súper destructivo por arte de magia si pasa de llamarse “Aaron” a “Daisy”. Sin embargo, la elección del nombre SÍ que importa a la hora de recoger donaciones una vez ha pasado el desastre natural. O, al menos, esto es lo que encontraron un grupo de investigadores de la universidad de Michigan (In the “I” of the storm: Shared initials increase disaster donations).
Éstos investigadores se dedicaron a analizar la base de datos de donantes de la Cruz Roja después de varios huracanes. Sorprendentemente, encontraron que, en los donantes del huracán Katrina, por ejemplo, había muchos más donantes de lo normal con un nombre que empezaba por K. De la misma forma, en el huracán Mitch, los norteamericanos que tenían nombres empezando por M aparecieron más de lo normal en la lista de donantes. ¿Qué estaba sucediendo?
Básicamente, si un huracán empieza con la misma letra que tu nombre, te sientes más identificado con el desastre y simpatizas más con las víctimas. El efecto es importante en cuanto a la cantidad de donantes, no los montos. Y eso es, posiblemente, porque el hecho de donar, no importa la cantidad, hace que uno ya se sienta “en paz” con sus obligaciones “sociales” o “morales”.
Éste efecto se llama, generalmente, el “efecto víctima identificable”. Es mucho más probable que actúes para una causa cuando te sientes identificado con ésta. De esta forma, el huracán Katrina en Estados Unidos causó menos daños que el tsunami asiático de 2004, pero recaudó muchas más donaciones.
Y, tal y cómo demostraron en este estudio, para sentirse identificado basta con un detalle tan sencillo cómo compartir inicial con el desastre natural. De este modo, de acuerdo a ésta investigación, si hay huracán en tu país y puedes ponerle nombre, ponle un nombre muy común entre tu población. En las mismas condiciones, conseguirás más donaciones para tu país que cualquier otro nombre menos común.